Servicio que nace desde el año 2003 y que se ha afianzado, convirtiéndose en un servicio esencial tanto para las familias como para los docentes. Hoy por hoy acrecienta su demanda cada año, sobre todo en el 2020 ya que las previsiones en la incorporación a las nuevas normas y pautas de “convivencia” debido a la pandemia hace que los centros demanden más recursos, como el ofertado por la entidad.

Como profesionales que trabajamos en el ámbito de la salud mental hemos constatado que existen muchos/as alumnos/as que presentan dificultades de aprendizaje y fracaso escolar, especialmente en las áreas instrumentales básicas, y que requieren ciertas medidas ordinarias de atención a su diversidad que respondan a las necesidades educativas que presentan, desde un marco de actuación lo más normalizado posible.

Además debemos facilitar la integración escolar de menores que conviven con personas con problemas de salud mental y la integración de menores que padecen dichos problemas generando un proceso de acercamiento entre el mundo escolar, el menor y la familia.

Dicho servicio se presta tres días en semana y en horario de tarde.

Objetivos:

  • Contribuir a la prevención de las dificultades de aprendizaje del alumnado.
  • Hacer hincapié en alguna dificultad que pueda condicionar los aprendizajes de las materias instrumentales básicas.
  • Luchar contra el fracaso escolar.
  • Reforzar los procesos de aprendizaje, apoyando directa e individualizadamente a los menores (en período de escolaridad obligatoria) en sus tareas, aportándoles técnicas y hábitos de estudio, que mejoren sus competencias cognitivas y su rendimiento escolar.
  • Estimular aquellos factores que conducen a un desarrollo positivo; y a la vez, disminuir factores que pueden poner en riesgo o que pueden obstaculizar un desarrollo psicosocial positivo. Estos factores pueden ser aplicados a nivel individual y familiar.